Nuestro Colegio

Concepto.

De acuerdo al Art 1 de la ley 115 de 1194, (ley general de Educación), “la educación es un proceso de formación permanente, personal, cultural y social que se fundamenta en una concepción integral de la persona, de su dignidad, de sus derechos y sus deberes”. En este sentido la Institución Educativa Nuestra Señora de las Lajas de Ipiales asume la educación como un proceso continuo donde el estudiante descubre en sus habilidades las herramientas adecuadas para aprender significativamente desde la experiencia, profundizando en aquello que es más representativo para su desarrollo personal y creando un trabajo colaborativo de aprendizaje.

Alcance.

Nuestra labor está orientada a afianzar en nuestros estudiantes su ser espiritual, formar sujetos capaces de hacer frente a los desafíos actuales siendo conscientes de su propio desarrollo personal.

Justificación.

La Institución Educativa Nuestra Señora de las Lajas de Ipiales regentada por la Hermanas Franciscanas de María Inmaculada presta su servicio educativo en la jornada de la mañana; atiende a una población de estrato social dos y tres; con miras a una formación integral de los educandos y con la participación de la comunidad educativa, siendo los estudiantes el centro del que hacer formativo para que respondan a los retos de la sociedad actual.

El modelo colaborativo problémico con enfoque humanista, nos permite considerar al estudiante como un ser holístico, dotado de valores, habilidades, destrezas que le permiten aportar a su propia formación y a la de sus pares con el trabajo colaborativo como parte del enfoque Institucional.

Con el Proyecto Educativo Institucional, el currículo busca el conocimiento a enseñar, el conocimiento de aprendizaje, los métodos de enseñanza, la evaluación formativa y continua; teniendo en cuenta las cuatro dimensiones del mismo: conceptual, cognitiva, formativa y social.

El Proyecto Educativo como carta de navegación de la Institución busca la excelencia educativa, teniendo en cuenta el Índice Sintético de Calidad Educativa para medir el estado de calidad, el mejoramiento mínimo anual (MMA), teniendo en cuenta los componentes del progreso, desempeño, eficiencia y ambiente escolar.

Lo anterior lleva a la Comunidad Educativa a buscar acuerdos de innovación, integración, metas, desempeños y superar los resultados. El PEI, propende por el fortalecimiento de las prácticas de aula tendientes a lograr aprendizaje significativo de los estudiantes, además, de la participación activa de la comunidad educativa con unos planes de mejoramiento que permitan la resignificación y retroalimentación del que hacer educativo.

Análisis de la problemática de la comunidad educativa.

La observación y el diálogo han permitido analizar la problemática de la comunidad educativa, teniendo en cuenta algunas características diversas a saber:

  • Jornada de la mañana: Muchos de los estudiantes provienen de familias sobreprotectoras, donde los padres de familia procuran con exageración brindar a sus hijos e hijas más de lo necesario, desplazando incluso, los lazos de amor y algunas responsabilidades con cosas materiales; en otros casos se vislumbra la ausencia de los padres de familia en el proceso formativo de los mismos desconociendo los lineamientos que la Institución tiene en su labor educativa. Estudiantes que carecen de valores espirituales y muchos de ellos con indiferencia religiosa.
  • Los medios masivos de comunicación: El mal uso del internet, celulares, redes sociales y en general de las TIC, hace que el estudiante no aproveche el tiempo libre, descuide sus deberes escolares, disminuya su creatividad y la comunicación y se descuide la investigación como estrategia pedagógica para el aprendizaje significativo.
  • Aunque los planes de estudio obedecen a los lineamientos curriculares, estándares básicos de competencia y derechos básicos de aprendizaje; en la práctica pedagógica se vislumbra una brecha significativa en cada nivel, que afectan los procesos de aprendizaje, de ahí la importancia de fortalecer las comunidades de aprendizaje (CDA), que fortalezcan los procesos de acompañamiento entre pares y promuevan estrategias didácticas en el aula dentro de las diferentes asignaturas teniendo en cuenta los DBA.
  • Los factores externos que hacen parte del contexto en el que se desenvuelven los estudiantes, influyen en la sana convivencia escolar, siendo algunos comportamientos más frecuentes: insultos, gritos, amenazas, apodos, mal trato físico y aislamiento social.

Misión.

La Institución Educativa Nuestra Señora de Las Lajas de Ipiales – Nariño, de carácter católico y privado, regentada por la comunidad de hermanas Franciscanas de María Inmaculada; ofrece un servicio educativo de calidad en los niveles de pre-escolar, básica y media, cumpliendo los lineamientos de Ley emanados por el Ministerio de Educación Nacional, a través de la ejecución del modelo Colaborativo – Problémico con enfoque   humanista, que favorece el desarrollo integral del estudiante; capaz de potencializar las competencias para la vida, respeto y cuidado del ambiente, desde el Evangelio de Jesús y la espiritualidad Franciscana, con formación en liderazgo, innovación, paz, bienestar y justicia social.

Visión.

La Institución Educativa Nuestra Señora de las lajas de Ipiales – Nariño, se posicionará hacia el 2025 como un centro líder de formación en liderazgo e innovación, con sentido humanista y personal cualificado, capaz de responder a los desafíos de su tiempo; promoviendo escenarios de investigación, ciencia, cultura, cuidado del ambiente a través del uso adecuado de las nuevas tecnologías y el apoyo de la comunidad educativa en general.

Filosofía Institucional.

La Institución Educativa Nuestra Señora de las Lajas de Ipiales, forma personas conscientes, capaces de ser protagonistas en su entorno social con base en valores humano – cristianos y con criterios claros para enfrentar su realidad. Brinda herramientas que dan al estudiante Franciscano autonomía, responsabilidad en sus decisiones y claridad en sus metas; de igual manera, promueve un pensamiento humanista que implica contemplar al ser en su totalidad.

Esta concepción lleva a propiciar una educación que responda al desarrollo integral de los estudiantes con una clara definición ética que los impulse a transformar su entorno con libertad y autonomía, comprometidos en la fe, la verdad, la justicia y la relación armónica con nuestra “casa común”[1]; basándose en la doctrina católica sin desconocer y discriminar otras doctrinas religiosas.


[1]             Carta Encíclica Laudato Si, No. 13-16. Llamado que hace al Papa Francisco a proteger la casa común y a estar atentos a los fenómenos sociales que surgen en la actualidad, especialmente a aquellos que destruyen la relación con la persona, con Dios y con el entorno.

Principios Institucionales.

  1. Espiritualidad Franciscana:Brindamos una educación integral y desde nuestra espiritualidad nos formamos para ser amantes de la vida defendiéndola en todas sus manifestaciones.  Nos caracterizamos por ser personas alegres y de buen humor, como talante característico para enfrentar las responsabilidades y las diversas situaciones de la vida. Nos formamos en la sensibilidad frente a las situaciones de pobreza e injusticias que surgen dentro de la comunidad y el entorno social. Como Franciscanos optamos por el más débil, por la entrega generosa, por la delicadeza, por la no discriminación acogiendo fraternalmente a todos. Somos constructores de paz, queremos contribuir a la no violencia a través de la tolerancia y el reconocimiento de la diversidad.
  2. Inclusión: La comunidad educativa acepta, acoge y respeta las diferencias.
  3. Feminidad: La institución asume el valor de la feminidad como un proceso permanente de reconocimiento en la importancia del rol de la mujer en la sociedad. Como mujeres cristianas se vivencia y se respeta el valor de la feminidad, valiosas en la diferencia, fraternas y serviciales, conjugando los valores humanos, intelectuales y el liderazgo en la transformación del entorno social.
  4. Caballerosidad: La comunidad educativa franciscana asume la caballerosidad como la delicadeza en el trato con los demás, en especial con la mujer. La caballerosidad asume ser prudente y justo en las apreciaciones y se manifiesta con el respeto mutuo en las relaciones interpersonales.
  5. Responsabilidad y Respeto: Enmarcados en la puntualidad, la sana convivencia, el cumplimiento del deber, el sentido de pertenencia y el respeto a las diferencias. La responsabilidad implica la obligación de responder por sus actos. El respeto es el aprecio o consideración que se tiene por uno mismo, por los demás, por las cosas u objetos personales o de los otros. Es el acatamiento de órdenes, leyes, mandatos, reglamentos, derechos y deberes que rigen las interrelaciones armónicas de la Institución.
  6. Autoestima: Basa su valor en sí mismo, es decir, es intrínseco, y, por lo tanto, es independiente de otros valores. La comunidad educativa reconoce y acepta de manera positiva sus cualidades y debilidades como seres humanos en continuo cambio. Es la valoración, consideración, aprecio que se hace de uno mismo, es el respeto que uno mismo tiene de su cuerpo, del uso adecuado y responsable de cada una de sus partes, de su propia integridad, física y moral.
  7. Tolerancia: Capacidad de aceptar y respetar al otro en sus diferencias individuales, en las relaciones de convivencia e interpersonales, toma de decisiones, posiciones, situaciones y condiciones diversasEs aceptar las diferencias o singularidades del otro, sin subestimarse, para buscar un equilibrio respetuoso y pacífico, en las relaciones y la convivencia social.
  8. Liderazgo: Es una comunidad consciente de sus fortalezas y debilidades, sabe trabajar en equipo, respetando a los demás, siendo íntegros, leales y sinceros, proyectando su identidad como franciscanos con gran capacidad e iniciativa.
  9. Innovación: Comunidad abierta que valora los cambios asumiendo con responsabilidad los retos, a través del uso de estrategias que respondan de forma eficaz y que impacten favorablemente a la sociedad. 
  10. Identidad: Comunidad que reconoce sus dones y carismas, todo lo que hace lo hace siempre bien, viviendo el lema: “Todo por amor a Dios y como Él lo quiere”.
  11. Superación:  Es una comunidad que no se queda con lo que le comparten, busca, investiga, lee para ser mejor y servir de la manera más eficiente a quienes nos rodean.